Uno de los textos ero´ticos a´rabes ma´s famosos de todos los tiempos, cuando, en palabras de sus editores: «la deliberacio´n sobre las pra´cticas sexuales y el placer del coito, incluida la enumeracio´n detallada de posturas y afrodisi´acos como ocurre en nuestro Jardi´n perfumado, era algo habitual en textos literarios y en la jurisprudencia isla´mica».